La prueba se desarrollará en el tradicional circuito de la Virgen de las Viñas y está previsto que finalmente sean cerca de un millar y medio los atletas que se den cita para competir en las diferentes categorías.
La competición, incluida en el calendario nacional de campo a través de la RFEA, no sólo destacará por la cantidad. La organización se está esforzando para reunir a atletas de primera fila, y prueba de ello es que en los últimos días once atletas que han participado en los últimos Juegos Olímpicos de Pekín ya habían confirmado su participación en Aranda, por lo que seguramente lo más selecto del fondo nacional estará en este cross, con la salvedad de aquellos atletas que representarán a España en el Campeonato de Europa y que, por incompatibilidad, se ausentarán.
En la prueba femenina María José se enfrentará a una distancia similar a la del pasado Cross de la Espada Toledana, con un recorrido de algo más de seis kilómetros, si bien el circuito de la localidad arandina es de mayor dureza con una exigente subida que las atletas deben superar en varias ocasiones. Junto a María José estará la atleta de Hinaco Monzón Marisa Casanueva, ambas preparadas por Phondy y que van de la mano por la motivación con la que están trabajando de forma conjunta.
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