Al pertiguista najino de Hinaco le faltó ‘chispa’, acusó problemas físicos y no pudo pasar de 5,40.
Estancado desde que en 2004 llegó a saltar 5,60, Gazol aspiraba a conseguir su tercer título en esta primera final de los 44 campeonatos de España en pista cubierta, pero se cruzó en su camino Bychkov en el palacio Luis Puig, que será escenario de los campeonatos del mundo del 7 al 9 de marzo.
Con el listón en 5,40 abrió Gazol con un nulo, Bychkov acertó a la primera y, aunque el de Hinaco Monzón lo hizo a la segunda, el orden de clasificación había cambiado: ahora era primero el ex ucraniano.
La plata dejó un sabor amargo a Javier Gazol. El najino estaba agotado y con el estado de ánimo bajo. “Físicamente no estaba muy fino ya que no me encontraba como debía para afrontar un campeonato de España. Ya en el calentamiento me han tenido que atender los fisios de la Federación porque tenía molestias en el glúteo izquierdo y en el isquio y no podía correr normal”, comentó el atleta del Hinaco.
Pese a todo, Javier Gazol está dispuesto a levantar la cabeza y a mirar con renovados bríos el objetivo de llegar a los Juegos Olímpicos de Pekín.
Estancado desde que en 2004 llegó a saltar 5,60, Gazol aspiraba a conseguir su tercer título en esta primera final de los 44 campeonatos de España en pista cubierta, pero se cruzó en su camino Bychkov en el palacio Luis Puig, que será escenario de los campeonatos del mundo del 7 al 9 de marzo.
Con el listón en 5,40 abrió Gazol con un nulo, Bychkov acertó a la primera y, aunque el de Hinaco Monzón lo hizo a la segunda, el orden de clasificación había cambiado: ahora era primero el ex ucraniano.
La plata dejó un sabor amargo a Javier Gazol. El najino estaba agotado y con el estado de ánimo bajo. “Físicamente no estaba muy fino ya que no me encontraba como debía para afrontar un campeonato de España. Ya en el calentamiento me han tenido que atender los fisios de la Federación porque tenía molestias en el glúteo izquierdo y en el isquio y no podía correr normal”, comentó el atleta del Hinaco.
Pese a todo, Javier Gazol está dispuesto a levantar la cabeza y a mirar con renovados bríos el objetivo de llegar a los Juegos Olímpicos de Pekín.
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