Una vez más, Eliseo brilló a su mejor altura en una final Mundial, ya que ha disputado su quinta cita mundialista y en todas ellas se ha metido en la final.
La carrera cumplió casi a rajatabla los pronósticos, con una salida fulgurante, con el sudafricano Ramolefi tirando en cabeza y seguido de cerca por la armada keniana. Por detrás, Eliseo salió a su ritmo, sin cebarse en la galopada africana, y se colocó en penúltima posición, pero con el grupo a la vista.
En una carrera velocísima, en la que el segundo kilómetros se corrió en 2.40 y el último en unos impresionantes 2.37, el mediocinqueño de Hinaco Monzón siguió a los suyo y a partir del segundo kilómetro empezó a recoger su fruto en forma de adelantamientos a varios rivales
Por delante, la carrera quedó casi decidida ya antes de la última vuelta, con un grupo de cuatro en cabeza, tres kenianos y el francés Tahri. Poco a poco fueron llegando corredores hasta Eliseo, noveno, con los citados 8.16.51, desde luego su mejor marca personal de la temporada y un crono que no conseguía en una cita de nivel desde los Juegos Olímpicos de Atenas, en 2004, cuando paró el reloj en 8.15.77.
El propio "Phondy", que presenciaba desde la grada la carrera de su pupilo, comentaba al poco de finalizar la carrera que "me he quedado sin palabras. Ha sido impresionante, un carrerón. Sabíamos que tenía que dosificarse, y una vez más a demostrado su clase y su saber estar en la pista. Ha rentabilizado a tope lo que tenía en las piernas".
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